A veces es una odisea rescatarlos porque surgen problemas de transporte, no se tiene tiempo para acudir a la perrera, y además sacar de allí a los animales tiene sus gastos de vacunación y chip, y quizá ya no se tiene para sacar a más perros.
Pero por salvarle la vida a estos pobres infelices, y devolverles la felicidad y la vida, merece la pena cualquier esfuerzo.
Una estupenda animalista de Sotogrande se ha llevado acogidos a PUMUKY, TEDY y FREDDIE (tres peludos que lo estaban pasando muy mal encerrados en la jaula) a la asociación protectora para la que colabora.
Este es Pumuky antes y después de sacarlo:
Este es Freddie:
Los dos en el maletero preparándose para irse:
Y aquí ya junto a Tedy también, que fue el último en salir de la jaula. Estaban tan contentos que se pusieron a darse lametazos y jugar, fue un momento muy emotivo.
¿NO CREES QUE MERECE LA PENA SALVARLES LA VIDA, Y DARLES UN POQUITO DE FELICIDAD? ELLOS A CAMBIO NOS ALEGRAN Y LLENAN LA VIDA
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